10 noviembre 2005

piano man

Esta es la historia de un sábado, que importa cual mes, y de un hombre sentado al piano, que importa cuan viejo o café.

toca otra vez viejo perdedor, haces que me sienta bien, es tan triste la noche que tu canción, sabe a derrota y a miel.

Cada vez el espejo en la pared, le devuelve más vieja la piel, se le encienden los ojos y su niñez, viene a tocar junto a él, pero siempre hay borrachos con barba que le recuerdan quien es, el más joven maestro al piano vencido por una mujer.

No lo deja que de malos pasos, aunque nunca desea su mal, pero a ratos con furia golpea al piano y hay algunos que le han visto llorar.

toca otra vez viejo perdedor, haces que me sienta bien, es tan triste la noche que tu canción, sabe a derrota y a miel.